En la final se encontraron una vez más con su máximo rival, el América, que ya le había arrebatado el título en 2 ocasiones, considerada por muchos de los jugadores de esa temporada como la última oportunidad para ganarle el título al cuadro de Coapa. El Milan puede jactarse de que es el único equipo de todos los que han ganado en alguna oportunidad la Supercopa transalpina que lo hizo en tres países diferentes de tres continentes.